Quiero que te vuelvas flor. La que tú quieras. Ser flor y ser tú. Una flor de primavera.
Te recogeré del suelo y te acogerán las hojas de mi cuaderno. Serás guardián de mis palabras escritas. Estático sobre el papel, inamovible, presente.
Y no me perderé ningún cambio porque no podrás cambiar.
Y no te dejaré nunca porque siempre vendrás conmigo.
Perdóname.
“Es demasiado frío este momento cuando siento que te pierdo” Amaral, Perdóname.
triste y bello, me encanta
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